Normas internacionales de información financiera aplicadas a los rubros deudores de las Pymes en Colombia

Abstract

En Colombia, la adopción de las Normas Internacionales de Contabilidad y Normas Internacionales de Información Financiera(NIIF) se ha dado de manera rápida por la necesidad de unificar los criterios contables que posibiliten la consolidación de la información financiera de las empresas colombianas; esto con la intención de entrar a competir al mercado global de manera estratégica, clara y consistente. (Grisales, 2015) afirma que las Normas Internacionales de Información Financiera son un conjunto de guías que benefician a las entidades, ya que los capacitan en el reporte apropiado de información contable y financiera. Desde sus orígenes, las Normas Internacionales de Información Financiera (NIIF) tienen como objetivo armonizar los principios contables para la práctica de la contabilidad de las empresas a nivel mundial (Gonzalez, 2015). Logrando su cumplimiento, las NIIF logra posesionarse como la normativa internacional de mayor aceptación y aplicación en todo el mundo, estas normativas presentan ciertos criterios financieros que involucran tanto a las grandes empresas como a las pequeñas y medianas entidades. Las pequeñas y medianas entidades también conocida como pymes, son entidades independientes dadas a conocer en Colombia a partir de la Ley 590 de junio de 2000, la evidente evolución de este sector empresarial y la importancia en materia económica y productiva que aportan las pymes sustentaron la necesidad de implementar las NIIF para las pymes esto con el ánimo de satisfacer las exigencias que presentaban las pequeñas y medianas entidades las cuales fueron saciadas en el 2009 con la ley 1314 por el cual se soporta los principios y las Normas de contabilidad e información financiera y de aseguramiento de información aceptados en Colombia para Pymes. Además de las Normas Internacionales de Información Financiera (NIIF), en Colombia también se desarrolló una norma que funcionan y que está dirigida particularmente a la aplicación de los informes de situación financiera de las llamadas Pymes Las pequeñas y medianas entidades son empresas integradas al aparato productivo, como parte de la cadena de valor en la estructura economía de un país, caracterizadas por su naturaleza de tipo privada ya que no se encuentran obligados a la hora de rendir cuentas, así mismo las pymes publican los estados financieros con el propósito de información general para los usuarios externos ( Consejo de Normas Internacionales de Contabilidad (IASB), 2015). En Colombia, las pymes fueron reglamentadas por primera vez a partir de la Ley 590 del 10 de junio de 2000, clasificadas por el tipo de empresas de acuerdo a la Ley como microempresa, pequeña empresa y mediana empresa, estas presentaban un número determinado de trabajadores y un nivel de activos por salario mínimo mensual legal vigente (SMMLV) en Colombia. A partir del decreto 957 de 2019, el Ministerio de Comercio, Industria y Turismo reglamentó la clasificación de las micro, pequeñas y medianas empresas según sus ingresos por actividades ordinarias anuales estas dependiendo el sector económico en el cual la empresa desarrolle su actividad. Actualmente, en Colombia las Pequeñas y Medianas Empresas son consideradas el motor de la economía, según cifras del DANE las Pymes representan el 67% del empleo formal en Colombia y el 98% del tejido empresarial, aportando el 28% del PIB nacional, resultados que se pueden atribuir a la aplicación de las nuevas tecnologías. (Mintrabajo , 2019). En este contexto, el análisis que engloba la situación financiera de las pymes sin discriminar a cuál sector se refiera (manufacturo, el comercial, el de servicios, entre otros) es de gran importancia debido a la gran capacidad que presentan las pequeñas y medianas empresas en la generación de empleo, así como al papel primordial que desempeñan como generadoras de riqueza en la economía de un país. Es entonces, que las pymes acceden a abrir nuevas alternativas que posibiliten la efectividad y eficiencia de las operaciones, comenzando de esta forma a implementar las Normas Internacionales de Información Financiera (Posso & Reina, 2017). La implementación de esta normativa en las pequeñas y medianas empresas cortejan el crecimiento económico y rendimiento productivo de la organización, generando cambios significativos en la abreviación y emisión de la información contable y financiera de las Pymes. En este orden de idea, la información financiera de las Pequeñas y Medianas Entidades exige encadenar la igualdad del idioma contable al igual que las grandes empresas, debido a la viabilidad de comprender una misma jerga permitiendo a su vez la comparación generada con respecto a las distintas realidades representadas en diversos contextos económicos. Por el cual, concordando con (Flores, Hernández, & Flores, 2012) por medio de la implementación de las NIIF es posible adoptar decisiones financieras con mayores beneficios en cuanto a la utilidad, efectividad y eficiencia de sus limitaciones económicas en concordancia con los elementos de los estados financieros contenidos en la administración financiera de la organización. De acuerdo a lo anteriormente planteado, los estados financieros siendo esta un componente fundamental en la contabilidad, constituye un papel fundamental en las operaciones internas de cada empresa, sobre todo en la toma de decisiones de una entidad, así mismo los elementos que conforman el estado financiero reflejan la situación económica de las empresas evidenciando las fortalezas, debilidades y aspectos a mejorar. En el estado financiero se representan el informe financiero conformado por los importes generados por los activos de las empresas, pasivos y patrimonio de las entidades. En este sentido, estas estructuras económicas se encuentran así mismo representados en cuentas o grupo contables fundamentales en la salud financiera de las empresas, tal como los grupos deudores, los rubros de esta categoría se refieren a las cuentas por cobrar a los clientes, estas son cuentas comerciales por las ventas causadas y acumuladas, que se tienen para convertirlas en efectivo. Las cuentas comerciales por cobrar son un instrumento financiero, que en NIIF para Pymes la encontramos en la sección 11 donde nos indica que es un contrato que se realiza con el cliente, que tiene una obligación con la empresa y este corresponde a un activo financiero y en el momento del pago se va a recibir otro instrumento financiero que es el efectivo.

Los rubros deudores corresponden a los elementos de más relevancia en la situación financiera de una entidad, los rubros deudores conforman los estados financieros con sujeción a las normas y procedimientos establecidos por las disposiciones legales vigentes se encuentran clasificados en rubros comerciales, rubros no comerciales u otros deudores, cuentas por cobrar clasificadas al costo. Cuentas por cobrar clasificadas al costo amortizado y los préstamos por cobrar. de este modo. las cuentas por cobrar representan uno de los activos más importantes para las empresas ya que con ellas cuentan con efectivo para poder cubrir sus obligaciones tanto internas como externas por eso es vital tener un análisis constante de las mismas para saber su estado y poder determinar su facilidad de cobro y tener claro si todas se pueden cobrar.